La gran discusión de 2018 será en torno al transporte porque al año siguiente vencerá la concesión de las empresas de colectivos. Además, todavía no se resolvió la ampliación del predio de residuos. Las dificultades financieras de la comuna seguirán en agenda.
Las elecciones legislativas de mañana definirán, en el plano local, la nueva composición del Concejo Deliberante, donde hay un cúmulo de asuntos pendientes y de proyectos que deberán discutirse en lo que resta de este año y los dos siguientes.
La gran discusión de 2018 girará en torno al transporte colectivo de pasajeros. En mayo de 2019 vencerán los contratos del municipio con las empresas que prestan el servicio, por lo que el gobierno local deberá tomar una decisión: prorrogarlos o enviar un nuevo pliego de bases y condiciones para llamar a una nueva licitación.
El debate ya tuvo su puntapié inicial con un pedido presentado esta semana por el bloque del Frente para la Victoria para que no haya prórroga. “Queremos que se discutan nuevas condiciones para el servicio en una mesa que se enfoque exclusivamente en el tema”, dijo a LA CAPITAL Balut Tarifa Arenas, uno de los ediles que firmó el pedido.
En el radicalismo, que forma parte del interbloque oficialista Cambiemos, también saben que el transporte será un asunto medular. “Hay que empezar a trabajar un año antes, como mínimo. Hay que debatir, entre otros puntos, si vamos a seguir con este esquema de transporte o se van a permitir combinaciones para que los usuarios, con un mismo boleto, puedan subirse a otro colectivo para completar sus recorridos. Además, hay que analizar si no es momento de replantear los recorridos”, dijeron en el bloque a este diario. Santiago Bonifatti (Acción Marplatense) coincide con que el transporte será un debate central. “Porque también debe discutirse la obra del metrobús, que sólo fue anunciada. Y el Ejecutivo también tiene que decidir si avanza o no con las fotomultas”, aportó. Ese proyecto, que generó fuertes polémicas, quedó estancado en las comisiones del Concejo.
Más reciente es otro proyecto del gobierno de Arroyo que aún no comenzó a ser tratado y también está vinculado con la movilidad urbana: el del estacionamiento medido, que establece la posibilidad de eliminar las tarjetas y ampliar zonas.
Pero si de asuntos pendientes se habla hay uno que encabeza el ranking. En enero la administración municipal presentó un proyecto de ordenanza para ampliar el predio de residuos, pero nunca vio la luz. Ni los oficialistas están convencidos de aprobarlo. Mientras, la oposición advierte que es imprescindible porque el módulo en que se arroja la basura está colapsado.
En un municipio con continuas dificultades financieras como el de General Pueyrredon, una discusión que se mantendrá omnipresente es la de los números. “Va a ser central en función de todo lo que viene pasando con los descubiertos bancarios para pagar sueldos”, advirtió Marina Santoro (Frente para la Victoria).
Bonifatti recordó que este año, por primera vez, se podrá establecer si se cumplieron las “metas físicas” que determinó el presupuesto. “Cuando uno pone que en la Secretaría de Educación se va a gastar un millón de pesos en tal programa, la meta es cuántos alumnos van a estar contemplados en ese programa; es decir, se pone en función de los objetivos. Vamos a poder determinar el cumplimiento o incumplimiento. Para aquellos a los que nos gusta la rigurosidad de los números, es importante porque vamos a poder sacar conclusiones del uso o mal uso de los recursos del Estado municipal”, acotó.
De la vieja agenda, los concejales consultados por LA CAPITAL mencionaron además el proyecto de los food truck, los que proponen mayor transparencia en la presentación de la información de la municipalidad y el del protocolo para personas en situación de calle.
“El tema de los food truck lo vamos a tener que sacar, hace tres años que lo venimos discutiendo”, dijo una concejal radical, y explicó que la norma dispondrá qué requisitos básicos deben tener los carros para ser habilitados para la venta de comidas.
“Lo del protocolo para personas en situación de calle está recontra pendiente”, lamentó Santoro. “Otro tema a los que tendremos que estar atentos -apuntó Bonifatti- es a las obras por la falta de gas. Si el municipio necesita realizar alguna obra complementaria para la conexión con el gasoducto, habrá que hacerla. Es un tema central no ya del Concejo, sino de la ciudad”.
A fin de cada año en el Concejo siempre hay tres debates espinosos: los aumentos de tasas, el del boleto y, en menor medida, el de la tarifa de taxis. Ninguno de los proyectos ingresó al Concejo, pero en algún momento lo harán. Entonces, habrá que ver si los trata la actual composición legislativa o quedan para el Concejo elegido en las elecciones de mañana, que debutará después del 10 de diciembre.